El Encuentro es un retiro de tres días especialmente diseñado para reconocer, confesar, renunciar y ser libres de lo que no nos deja tener un encuentro más íntimo con Dios. En el ‘Encuentro’ somos confrontados con nuestros pecados, heridas, traumas, temores, luchas, orgullos, complejos, y toda situación del pasado que impide que el propósito de Dios se realice en nuestras vidas.